Cuando chico, saliendo de la niñez y entrando a la adolescencia, más o menos, la tarea de que me envíen a depositar al banco no me molestaba para nada, es más; me gustaba. Generalmente era en época de vacaciones en las que también “trabajaba” en el taller de carpintería de mi papá y cuando me tenía que ir a hacer los depósitos ni siquiera me cambiaba de ropa y me iba con mi pinta de oficial de maestro carpintero, que consistía en un viejo pantalón de calentador (sudadera), zapatos gastados, camiseta más o menos decente, una chaqueta de cadete que había pertenecido a un primo que no hace mucho había entrado a la Escuela Militar y una gorra. Todo el “uniforme” con manchas de pintura y masilla y lleno de aserrín y viruta.
Pero esas eran otras épocas, cuando no había mucha gente en el banco y le encontraba gusto a ver e imaginar las vidas de las personas que estaban haciendo cola. Colas mejor dicho, antes se hacía una cola por ventanilla, hoy es una sola cola para todas las ventanillas. Entonces saber escojer una buena cola era también una ciencia, un arte. Había que conocer a los cajeros y su rapidez, a los clientes y cuánto generalmente depositan. Si el cajero era nuevo mejor ni arriesgarse, si había una cola corta y había alguien en ella que no se conocía era necesario tratar de estudiarlo rápidamente para averiguar cuánto pensaba depositar, lo que evidentemente afectaría el rápido o lento avance de la fila.
Ahora no me gusta ir al banco, no me gusta esperar en la cola (debe ser porque no tengo un reproductor de mp3 portátil), no me gusta quedarme escuchando la música que ponen en los parlantes del banco (generalmente una mala radio), ya no me gusta. Pero hoy tuve que ir.
Llegué antes de que abran las puertas al público pero la fila en las afueras ya estaba algo larga, ni modo, a hacer cola. Abrieron puntualmente y empezamos a ingresar, pero nunca faltan los “vivos” para quienes la fila es un chiste y se apresuran a “ganar puesto” en los primeros lugares de la cola. Yo, y mucha gente más, seguimos avanzando con nuestro paso normal, total ya estábamos en la cola, ¿cierto?
Mientras avanzo por el sinuoso camino que obliga a la cola de gente a formar una fila “serpentina” una señora “viva” corta camino y se coloca frente a mí. Pongo mi brazo frente a ella y avanzo nuevamente para colocarme delante suyo:
* Señora, usted estaba atrás. – le dije –
* Si señora, respete la cola. – asintieron aquellos a los que también la “vivísima” señora había adelantado –
* Pero si yo estaba en la cola. – replica firmemente la señora en cuestión –
* Claro que usted ya estaba en la cola, señora. Pero más atrás. – volteo y le comento a la “viva” –
* Ja, yo pensé que aquí habían caballeros, pero no, se ponen a discutir con una mujer. – recalcó iracundamente la mujer –
A mí me gusta cabrearme por nada, esa sensación del hígado burbujeando, el temblor del cuerpo y sentir la ira fluir muchas veces me sirve de terapia distensionante así que le respondí:
* Soy un caballero, señora. Por lo visto usted no es un dama sino más bien una viva y una sapa.
* Usted tiene cara de sapo. -respondió inmediatamente la “dama”-
* Tiene que aprender a ser disciplinada, señora. Hay que respetar la cola. -se escuchó de parte de una señora que se encontraba detrás de la “viva” pese a haber llegado antes y tener un puesto más adelante en la cola original-
* Tanto problema que hacen. Yo si estaba en la cola. -dice airosamente la “viva”-
* Señora, no es idea nuestra, todos aquí la vieron, no se haga la viva. Hay que ser educado y disciplinado como le dijo la señora. -me atreví a decirle-
* Y sigue, no tiene respeto por las mujeres. No me moleste, ya lo hice pasar, estoy detrás suyo, ¿qué más quiere? -argumenta molesta-
* El respeto no es cuestión de género, señora. Todos nos merecemos respeto. Además para algo está la cola, simplemente hay que ser educado, respetuoso y disciplinado, cosas que al parecer a usted le faltan. -tuve que decirle-
* No me moleste y avance. Tanto problema por nada. -enojadamente me dice-
* Ya la estoy diciendo que no es por nada señora, no estamos locos por algo le reclamamos. -le dije-
* Vos eres el loco y no me molestes que te empujo y te golpeo
Ya, ahora me trata de “vos”. Ahí si me molesté, pero traté de mantener la calma… bueno, en lo posible.
* ¿Cuál vos pues? -me volteo y le digo-
* Vos, loco, irrespetuoso, cara de sapo y no me molestes que te golpeo. -ya se puso gallita la “señora”-
* ¿Me golpea?… ¡a mí que putas! -uf, yafs, solo una mala palabrita-
Y empezó la cantaleta de la mujer, siguió diciéndome un montón de cosas hasta que puse mi mano frente a ella y empecé a hacer de boca con mi mano, ya saben la clásica representación del “bla, bla, bla” hasta que…
* Si vos pareces el loco, hasta los ojos tienes de loco. -Uy, mal movimiento mi señora, groso error, no me de ideas-
Bajo mi mano, me volteo completamente hasta estar de frente a ella y me empiezo a acercar mirándola fijamente con mi “mirada de loco”
La vieja loca no soportó más y me lanzó una cachetada. Pensó que se la iba a devolver porque apenas su mano tocó mi mejilla bajó la cabeza y dio un paso para atrás.
Yo solo atiné a sonreirme, voltear mi cabeza y decirle: “Dale otra, vieja loca”
Para ese momento la gente empezó a llamar al guardia y “acusaron” a la señora de abusiva, malcriada y de haberse saltado a propósito la cola. El guardia le pidió que se coloque en el lugar que le corresponde o caso contrario no la atenderían en ventanilla.
* El que ríe al último ríe mejor. Pero si quiere usted también puede reír al último… al último de la cola. -le dije finalmente-
Hoy fue mi primera vez. Nunca antes nadie me había cacheteado.
Ahhhh, amo el ardor de una cachetada en las mañanas.
Aplicando los principio del Tao mi estimado… El NO Hacer funciona mil veces más, que el hacerle entender a una descarada.
Eso necesitamos en este país, gente que simplemente no solape tonterías.
En cambio yo, el año pasado, di mi primera bofetada, te la cuento allá donde usted sabe.
mi querido.. que historia!
pero como me decias, esa rabia desesperante que uno siente en momentos asi es casi deliciosa. enjoy it.
por la vieja? que ridicula señora, por exigir tonterias solo por el genero, y por meterse contigo; yo ni te hubiese contestado, q miedo!
Jua!!! Jua!! al salir del banco era que te acerques y le amenazes, asi la man no podría pegar un ojo siquiera unas dos semanas
Saludos desde el centro del mundo
Si Phantom me pone ojos de loco, me puedo estar atorando de risa más que nada. Pero con cara de sapo y todo … un abrazo al papurro!
Hubiera cambiado tu respuesta por un “eso es todo lo que puedes dar, PERRA” asi le dabas el toque Tarantinesco al asunto (y la perspectiva de degollar a una vieja parlanchina con un katana no esta de mas)
Un abrazo!
Las cosas q te pasan son para una novela comica; para q no te pase eso; deposite sus fondos en Cooperativa Tulcán; La grande del Pais, a y rifamos dos autos.
jaja
Mi primera (y única) vez fue hace unos 10 años… por las huevas también.
Qué interesante reacción, Phantom. Me refiero a la tuya. Yo también tengo cara de sapo, pero no soy sapo. Tan sólo me hago el sapo. Pero soy más que eso.
yaaaa vas a decir q en ese tiempo habia bancos en Tulcan ja, si halla llevan la luz en baldes y el arco iris es blanco y negro
Slds
Oye man pero en Tulcan no creo q haya colas de mas de 10 personas… es decir si existen bancos allá, o ivas al banco de sangre
solo bromita
Slds
“Eso necesitamos en este país, gente que simplemente no solape tonterías.”
Eso mismo: Phantom Delacroix, sin solapar tonterías desde… chuta, no me acuerdo.
Si, Paulette. Disfruté la sensación. Había que sacar provecho de algo.
Ya era hora, Sire. Aunque tu apapacho debió llegar ayer 😉
Chuta Ludo, desgraciadamente los jueves no ando a cargar mi katana Hattori Hanzo.
Jajaja, Peluso. Están en todo lugar, están por todos lados. En el banco, en la cooperativa, solo cambiaba el escenario y no los protagonistas.
Pues si, Schiz. Pero es que hasta para ser un buen sapo o hacerse pasar por uno hay que tener talento y a algunitos ni para eso les da.
CD, el movimento bancario en Tulcán es simplemente impresionante. Siempre ha sido así. Se mueve harta plata.
Así es Guillermo, por “sencillos” o “buena gente” hay que aguantarse muchas vainas.
Cuando mi vida sea llevada al cine, para esta escena sonará de fondo la canción de Control Machete.
… mírame a los ojos, verás lo que soy. Jajajaja
Ja ja ja ja
yo me habría asustado cuando te acercabas peligrosamente con ojos de loco…
mmm… nunca he dado una cachetada 🙁 Ya me voy a buscar algún voluntario pa saber que se siente.
La idea de Ludo fantastica, la respuesta super original, y al final lo q dice atrapasueños una amenaza de “sé donde vives…”
Qué gente tan grosera… La peor en donde a todos pagan.
¿No habrá sido alguna cerda de corta estatura?
Al parecer poner comillas en el nombre de quien comenta hace que no salga publicado. El anterior comentario es de “buen” hombre.
Y bueno, “buen” hombre, era más baja, más “oscura” y más gorda que yo. No sé si eso signifique que era una cerda de corta estatura.
Hay algo que no se le puede negar a la vieja:
Tienes cara de sapo…
… pero de sapo reventado al sol!
Así dez!®
Se dice ‘chancha omota’.
(A pesar de tener la ‘ch’ la palabra ‘chancho/a’ está entre mis favoritas.
Encore, encore!
A mi me encanta la trifulca a favor de la defensa de ls derechos del consumidor y en contra de la idiotez masificada ultimamente.
Entiendo ese feeling que describes tan realistamente. Me fascina buscarle bronca y expresar mi opinion a la gente abusiva.
Aunque la verdad, si me hubiera pegado no se que le hubiera hecho… Talvez tendria que dejar que toda la furia de Amon-Ra se exprese contra esa mortal crecida.
Y ya pregunte por el “socio” y me dijo que no le habias dicho nada..?
Todos los jueves estoy alla por la U, si quieres hacemos un Radio04 (que feo, autoinvitandome) ya que resulta que yo tan tengo programa de radio aca en Ibarra!
Bueno, no le dije nada al “socio”, la idea era que simplemente le pidas que te traiga al local, pero creí que venías en fines de semana, pero si se trata de los jueves entonces para el próximo le daré las instrucciones precisas al “socio”, jejeje.
Este fin de semana voy a estar en Ibarra, buscando desenfreno y diversión con algunos panas, déjame tu número de celular en el email y te contacto porque posiblemente FAP, el recién llegado de tierras gringas, también estará por ahí, de pronto armamos un mini B&B&Salsa (si, me llevan a ese concierto que va a haber en tu tierra).
Saludos
Je je. Debió haberse filmado el asunto. A mi cada vez que me pasa que algún viva/o se quiere colar me saltan las hormonas. La ultima vez fue en Ferrisariato, cargado no me acuerdo que vaina se me cola una tipa. La que se armó. Le dije que por personas abusivas como ella el país estaba como estaba. Todo el mundo le mandó a su puesto.
Buena!!!
Solo te digo que esas viejas son las mamás de las peladas más ricas… y es en serio, es algo así como una compensación de la vida… aunque más bien sería una ley cosmica… TE IMAGINAS QUE SEA TU FUTURA SUEGRA????
Saludos Phantom y procura no pervertir al buen FAP je,je
byrongio
Yo hubiera aguantado la cachetada, me le habría acercado y susurrado al oido: Sé dónde vives.
Y después hubiera seguido como si nada.
hace como dos meses en la fila del banco yo veìa de reojo como una señora comenzaba a hacer fila y ‘milagrosamente’ se colaba de todos sin importarle nada y sin q nadie le reclame. cuando estaba a dos personas de mi, me dije.’no voy a dejar q pase esta sapa’ pero la señora descarada y todo llegò justo hasta detràs mio. yo, a diferencia de los demàs, no le dejè avanzar y justo cuando me iban a atender en la ventanilla los de la fila gritaron en gajo:
OE PERO DEJALA ADELANTARSE! NO VES QUE ESTÁ EMBARAZADA!!!
(en efecto, no lo había visto)
pero la mujer en vez de ponerse en frente de la ventanilla con el letrero de ATENCION A TERCERA EDAD, EMBARAZADAS, ETC. se puso a jugar a ganarnos a todos en la fila. honestamente le hubiese dejado avanzar pero no vi q estaba embarazada, claro, nadie me creyò y me gritaron hasta que salì…
Guau… no pense que le ibas a decir todo eso.
jajaj cague de risa lo de la cachetada.
Las cachetadas hay que sensacion mas ricas, jeje pero siempre y cuando sea por algo bueno, coincido con todos le hubiera dicho que se donde vive, y tenerla en panico un buen rato, pero bien sacada la situacion.-
Un abrazo desde el infierno.-
Caresapo! Careloco! Trato de evitar esos momentos de ira extrema porque una vez me desvanecí en la escuela después de enfurecerme. De grande no me gusta complicarme y prefiero ahogar mi ira asesina tragando en seco y contando hasta 100, o con unas pintas de acuerdo a la ocasión y a la disponibilidad.
No pense que te sucedan cosas como esas, en la escuela no eras tan loco, pese a que eras mi mejor amigo con el Willian Segarra. Tal vez la fama de loco es por las patillas.
Te felicito por escribir tiras comicas, nos tienes riendo al peluso, al bender y a mi…